Tuesday, January 22, 2008

Sobre el Sexo Sagrado

El gran escritor ruso Alexander Solyenitzin afirmaba que el verdadero arte era aquel que honraba al Espíritu humano y debido a que el Espíritu humano se había perdido, ya no existía más el arte y éste había sido reemplazado por manifestaciones grotescas y decadentes, absolutamente carentes de contenido, trascendencia y significado, a las cuales se les llamaba arte.
Como se perdió el Espíritu humano?
En realidad se perdieron las claves de acceso, pero el Espíritu Humano está siempre presente, esperándonos. Al perder las claves de acceso, perdemos toda posibilidad evolutiva y nos condenamos a la vida gris y chata del rebaño o como diría Juan Salvador gaviota, nos condenamos a la vida de la Bandada, a no salir nunca de Matrix, ni siquiera a preguntarnos si existe Matrix.
Las claves de acceso están en el sexo, en el Eros. Vivimos en una época en que todo está erotizado. Se nos bombardea a cada minuto con sexo multimedial y esto genera una presión que si no es adecuademente manejada, si no se tiene la clave para sublimar, entonces lo único que podemos hacer para aliviarla es desperdiciar esta energía preciosa y lamentablemente esta energía no es ilimitada.
El sabor del sexo no sublimado es como una droga muy adictiva, provoca una sed infinita de más sexo y convierte a las personas en zombies del sexo, perdiendo interés y entusiasmo por todo lo demás. A modo de ejemplo, por lejos las páginas más visitadas de internet son las porno. El canal de cable de mayor crecimiento en Chile es Playboy, la música de moda es el vulgarmente erotizado Reggaetón, antes fue el Axé. Si a esto le sumamos las teleseries, series nacionales y extranjeras sobrecargadas de erotismo, programas de todo tipo para enmascarar la venta de sexo, etc. etc., podemos ver que hay un hambre desenfrenada por consumir sexo y los medios lo siguen proveyendo abundantemente.
Esto es particularmente perjudicial en la juventud, ya que el fenómeno descrito los inclina a iniciarse a muy temparana edad en el sexo, sin tener la madurez emocional ni sicológica para hacerlo, sin amor, sin romanticismo, sin comprensión, sin compromiso. Los jóvenes quedan a muy temprana edad atrapados por la droga sexo y privados de acceder a su polo opuesto, al romanticismo, al idealismo, al heroísmo, al Espirítu humano. El resultado de este fenómeno provoca una grave debilidad de carácter en los individuos que incide finalmente en la capacidad como nación para desarrollarrnos. (Habrá alguien interesado o que manipule para que esto sea así...?)
La salida, la clave está en sublimar la energía sexual. Alguien podría pensar que por que está casado o tiene pareja puede canalizar la presión erótica descrita simplemente aumentando su actividad sexual; Falso, sólo va a lograr desmagnetizarse más rápido y pronto perderá la atracción que siente por su pareja y viceversa. Por este camino, la sed no se acaba....
La práctica del auténtico arte, la buena música y el deporte como disciplina individual, la vida en contacto con la naturaleza, la contemplación, la comprensión profunda de nuestras circunstancias de vida, las genuinas artes marciales, la meditación y la práctica de las virtudes humanas permiten efectivamente sublimar la energía sexual y nos dan acceso a las claves perdidas para ir encontrando nuestro perdido Espíritu, del cual efectivamente podemos llenarnos y apagar aquella sed desesperada. Recuperadas nuestras capacidades, podemos emprender el Camino, podemos acometer la Gran Obra del Espíritu Humano... El sexo con nuestra pareja puede efectivamente sublimar esta energía, pero es requisito previo aprender y comprender cómo se sublima en forma individual.
Por esto, por representar la clave para acceder a nuestro propio Espíritu, el sexo es sagrado.


El hombre fue expulsado del Paraíso por el sexo y puede volver a él a través del sexo.